Existen un amplio abanico de seguros de responsabilidad civil ya que son muchas las circunstancias que pueden acontecer al asegurado. Uno de los más habituales, y cuya contratación está 100% recomendada, es el de particulares. De esta manera, quedan cubiertas las indemnizaciones que se deriven del daño causado por el asegurado, así como por los animales o las personas que se encuentran a su cargo.
En el ámbito laboral, también existe el seguro de responsabilidad civil para autónomos, con el que los trabajadores por cuenta propia están cubiertos de los daños a terceros que se ocasionen en el desempeño de su actividad comercial o empresarial. El seguro de responsabilidad civil para gerentes y administradores ha tomado una gran relevancia en los últimos años ya que ofrece cobertura para proteger su patrimonio personal y para evitar las consecuencias económicas de procesos judiciales.
Y, por último, el seguro de responsabilidad civil de caza y pesca. El objetivo es que el asegurado esté cubierto de los daños a terceros que se deriven de estas actividades, que en algunos casos han llegado a provocar hasta la muerte.